El quinto, Steven Spielberg, consiguió que a finales de los 70 y sobre todo en la década de los 80, muchos espectadores amaran el cine como un vehículo de aventura y fantasía. De mi infancia recuerdo a E.T. señalando con su dedo a las estrellas y pronunciando la mítica frase: "Mi casa, teléfono" o a Indiana Jones con su látigo viviendo asombrosas aventuras en cualquier lugar del mundo.
Este maestro del cine tiene una filmografía llena de grandes películas. Su primera película fue un telefilm titulado "El diablo sobre ruedas" que tuvo gran repercusión en su país y por eso se estrenó en Europa en salas de cine. Gracias a la excelente acogida que tuvo este film pudo realizar su primer largo para la pantalla grande, "Loca evasión" . Llamó la atención de tal manera que le dieron a dirigir una de la producciones más importantes de la Universal. No sé quién fue la persona que sugirió su nombre pero fue una de las decisiones más acertadas de la historia del cine. Esa producción era "Tiburón", que se convirtió en una de las películas más taquilleras de la historia. Spielberg transformó un libro sobre la caza de un tiburón en una cinta de terror y suspense. Fue tal el impacto que ocasionó que las playas de California ese año se quedaron vacías.
Steven Spielberg y su monstruo marino
Su siguiente film siguió la senda de triunfo del escualo. "Encuentros en la tercera fase" es una maravillosa película de ciencia ficción. Contiene una composición de John Williams utilizada para comunicarse con los extraterrestres memorable. Solo son varias notas pero se recuerdan para siempre. Escenas inolvidables son la aparición de las luces en la carretera o el "secuestro" del niño. En 1979 rodó "1941" uno de los mayores fracasos de la historia pero un film apreciable. Era una comedia espectacular, ruidosa y destructiva y su guión estaba firmado por Robert Zemeckis y Bob Gale ( ambos escribieron también la maravillosa "Regreso al futuro" ).
El niño no puede evitar la llamada de los extraterrestres
Con la llegada de los 80 se crea el mito: Indiana Jones. Mucho se ha hablado sobre la trilogía del arqueólogo, por eso solo comentaré que mi seudónimo es homenaje al aventurero por antonomasia. De 1982 es "E.T.", vista por Dr. Jones a la edad de seis o siete años y para no ponerme nostálgico mencionaré solamente que la dirección es sublime en un film técnicamente perfecto. "El color púrpura" ( ¡¡¡ 11 nominaciones al óscar y ninguna para su director !!! ), "El imperio del sol" y "Always" son los dramas que hizo en esta década.
El año 1993 fue un año mágico ( antes realizó "Hook" que no tuvo la repercusión esperada ): "Parque Jurásico" ( reconocimiento del público ) y "La lista de Schindler" ( reconocimiento de la crítica). Después llegaron "El mundo perdido", "Amistad", "Salvar al soldado Ryan" ( Magistral película bélica ), "Inteligencia artificial" y "Minority report". "Atrapame si puedes", "La terminal", "La guerra de los mundos" y "Munich" son sus últimos trabajos. Destacan estos dos últimos títulos aunque las otras son también apreciables.
Como productor nos ha dejado, sobre todo en los 80, títulos que fueron el último empujón para que yo amara al cine hasta que la muerte nos separe. "Poltergeist", "Gremlins", "Los goonies", "Regreso al futuro" y secuelas, "El secreto de la pirámide", "Esta casa es una ruina", "El chip prodigioso", "¿Quién engañó a Roger Rabitt?" y en los últimos años un ejemplo sería "Hombres de negro". No son películas para pensar sino para SOÑAR y a Dr. Jones le gusta soñar. Se ha dicho hasta la saciedaz que Spielberg es un niño grande haciendo películas. Pues que no crezca nunca y siga así hasta el día que nos deje. Nos quedará su cine para que aprendan las generaciones posteriores a soñar y ser feliz. Gracias por enseñarme amar el cine.
Recomiendo un maravilloso libro de Javier Ortega, "Spielberg, el hacedor de sueños", lectura para cinéfilos de cualquier índole. En mi caso, una gozada por encontrar a alguien que defiende con tanto entusiasmo como yo a este gran cineasta. Más información del libro en la baca pop. Publicada el 8 de diciembre de 2006.
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